Ciudad Juárez. – El regidor Joob Quintín a la baja sus bonos de popularidad en su partido, porque los que lo quieren ver fuera de la dirigencia del comité municipal, ayer se esforzaron por hacer viral la denuncia que tiene por el delito de violencia familiar, según la causa penal 1223/2022, carpeta de investigación 22657/2021, del Juzgado de Primera Instancia en materia penal.
Quintín está acusado de actos abusivos de poder para dominar, controlar y agredir de manera psicológica a su expareja. Por tal motivo, el regidor panista está citado a comparecer ante la jueza de la causa el próximo lunes 7 de marzo y, de no hacerlo, el Ministerio Público podrá solicitar orden de aprehensión en su contra.
Quienes lo quieren ver no solamente fuera del PAN, sino tras las rejas, se esforzaron por difundir el expediente del caso por las redes sociales, por WhatsApp y hasta a través de correos electrónicos. O sea, se pulieron en quemarlo para que no llegue ni siquiera al mes de noviembre, cuando oficialmente es la renovación del comité municipal que todavía preside.
Lo curioso del asunto, que data del 2021, es que la comparecencia se programó en una fecha emblemática, en la víspera de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, como para recordarle al edil que de nada vale tener poder como servidor público, representante popular y dirigente de un partido político cuando te pasas de lanza con una mujer.
Si el panista quizá pensó que sus posiciones le iban a dar impunidad, craso error. Esta faceta del regidor seguramente obligará a los miembros de la fracción panista del Cabildo a plantear la posibilidad de que pida licencia y se retire del cuerpo colegiado para que sea llamado su suplente, porque en una situación como esta, en su carácter de indiciado en una causa penal, su posición al frente de cualquiera de las comisiones del Ayuntamiento es insostenible.